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Éxito de la conversión al aluminio ecológico en la fábrica en Nenzing
Gracias al aluminio más sostenible, Griesser ahorrará en el futuro un 30 % de CO2/kg de aluminio.
Desde las clásicas contraventanas abatibles hasta las elegantes contraventanas correderas, la gama de contraventanas producida en la planta de Griesser en Nenzing se fabrica desde el pasado mes de septiembre casi en su totalidad con aluminio ecológico. Gracias al aluminio más sostenible y producido en Europa con energías renovables, el especialista suizo en protección solar ahorrará en el futuro un 30 % de CO2 por kg de aluminio, lo que supone un gran paso más en su camino hacia el objetivo de cero emisiones netas.
En Nenzing, Griesser produce toda la gama de contraventanas, que consta de diferentes variantes de contraventanas correderas y abatibles. Con el objetivo de convertir toda la gama de la planta austriaca al aluminio ecológico para finales de 2025, Griesser lanzó su ofensiva de materiales sostenibles en noviembre de 2024. Para Urs Neuhauser, director general del Grupo Griesser, la elección de los productos era obvia: «Nuestra gama de contraventanas es la que consume mayores cantidades de aluminio. Por lo tanto, con el cambio de material en Nenzing pudimos lograr rápidamente un gran impacto».
El pasado mes de septiembre, la empresa de protección solar, que opera en toda Europa, casi alcanzó su objetivo y ya utiliza un 95 % de aluminio «bajo en carbono» en la producción de su gama de contraventanas. Con el aluminio verde, Griesser ahorra hasta un 30 % de CO2 por kg de aluminio y alcanza ahora un valor de 3,3 kg de CO2/kg de aluminio.
El aluminio más ecológico, producido en Europa con energías renovables y tecnologías modernas, garantiza unas emisiones de CO2 hasta cinco veces menores en comparación con la producción convencional, que consume mucho carbón.
Griesser no hace concesiones en lo que respecta a la producción sostenible: la calidad se mantiene al alto nivel habitual de Griesser y todos los productos de aluminio ecológico están sujetos a los plazos de garantía anteriores. Al igual que el resto de la gama de Griesser, las variantes de modelos más ecológicos también cuentan con la certificación EPD.
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